La intensificación en la producción ganadera presenta diferentes desafíos, desde la corrección de ineficiencias en el manejo de los rodeos hasta el impacto en el aspecto sanitario. Así lo refleja un informe del INTA que pone el énfasis en considerar las consecuencias de llevar adelante un planteo de intensificación en los sistemas ganaderos. La cuestión es crucial cuando se plantea el objetivo de aumentar la producción de carne y leche en el país y se proponen estrategias de intensificación.

Según Germán Cantón, del INTA Balcarce, los sistemas de producción en distintas zonas de la región pampeana, en general, «demuestran una ineficiencia marcada». Cita, como ejemplo, los porcentajes de destete logrados históricamente en los sistemas de cría bovina. «De cada 100 vacas que todos los años ingresan a los servicios, obtenemos al final del ciclo, 65 terneros, lo que implica que hay 35 vacas que están improductivas», explica.
Después «es posible empezar a plantear cambios para aumentar la producción de alimentos de origen animal por hectárea utilizada y la demanda de proteína de calidad para una población mundial en crecimiento», añade el informe.
De acuerdo con el especialista, «si se empiezan a realizar recrías de terneras para lograr llegar tempranamente a edad de servicio, hay que tener en cuenta que algunos problemas sanitarios podrían acentuarse», por ejemplo, en los últimos años con «una mayor incidencia de la Neosporosis, como causa de abortos en sistemas de producción de carne», enfermedad común en el sistema productivo lechero, por ser más intensivo.
La frecuencia de encierres, con alimentos a los que los rumiantes deben acostumbrarse, trajo aparejada una mayor presentación de cuadros de intoxicación o problemas metabólico-nutricionales. Entre otros problemas registrados en la región del INTA Balcarce, están los cuadros de Diplodiosis e intoxicaciones con nitratos y cianhídrico asociados al consumo de maíces y sorgos.
Indica, además: «La inclusión de diferentes suplementos en estos sistemas, también tiene sus implicancias sanitarias/productivas; es así, que la intoxicación que mayormente se diagnostica en nuestro Servicio de Diagnóstico, es la provocada por el exceso de ionóforos en la dieta».
Si bien la intensificación es un camino sencillo para mejorar la producción de alimentos de calidad en la Argentina, el cambio de manejo debe atender a estas consideraciones para estar preparados para sobrellevarlos. (fuente: INTA)